Olas de nubes....

La circunferencia de la tierra ha dejado sus huellas dactilares sobre las rocas calizas que forman las rutas para llegar a tus sinuosos contornos....

El pájaro que canta nuestros pensamientos y sueños, ha decidido dejar de volar. Nadie volaba con él alrededor del sol, tomando un gran paseo por el jardín de tus labios, sin temor a tomar escalas en los recuerdos y banalidades ambiguas. 

La noche había encontrado un tambor, y con sus grandes alas hizo sonar las notas que Dios guardaba con tanta premura bajo su almohada, cerradas bajo olas de nubes, que nos sonríen impacientes de llegar a su metamorfosis y poder tocar lo que tanto han pedido al universo: Ser tú.

Caminé durante horas sobre los campos verdes que nunca mueren, y a lo lejos, imperceptible, una luz silenciosa fue abriendo paso a mís ecos subterraneos, y, pude verte, plasmada al óleo del cielo claro, miles de formas de dar vueltas sobre un rocío de agua y no...

Vuela sobre la espalda de mis labios, sé parte del sistema solar que adorna mis noches...

Inventame...

Cual es el sabor de tu frenesí? lo he buscado por doquier, dando vueltas en tus columpios, preguntandole al aire que escapa de tu sombra y del polvo que levantas al caminar...


Te moldee como he moldeado la base que se asoma de tus labios, la respuesta sobria y justa del bandoleon que suena en tu risa. Inundame los besos de tu voz en mi suspiro, estrellame contra la pared de tu piel, fundeme en tus pies, quiero inhalarte como una gran bocanada de jazz nocturno y provocar la envidia de la noche misma, absorberé tu aliento y tu olor, seran mi carta de presentación y mi susurro...

Inventame en tus dedos, en tus miradas, en toda tu magia... Ahora, soplaré de manera tan somera, que te traeré hasta aquí, conmigo...




 

Estallido...

Empastillado por tanta noche afilada, mis huellas dactilares bailan alrededor del ritmo del fuego que la luna me ha preparado especialmente como un regalo para darme la bienvenida al ombligo del mar...

Decapita mis recuerdos, mis razones, todo juntalo en una bolsa negra, trata que sea imperceptible a la vista, y estallala en mil desiertos en tus suaves manos, enguajate con tus palabras vastas y obsoletas, porqué, de ningún otro tipo de metodología podrás eliminar de la faz de tu aliento, mi última bocanada...

Atornillado...

De donde es qué provienen esas gotas de café?

Como es qué se puede explicar con letras oscuras y perfiladas, lo absurdo e ilógico en un tornillo sin espiral... no sé.


No sé, el porqué los sentimientos pueden enredarse tanto en la cuerda de un tornillo, y sin escapatoria, son estrujados contra la fría espalda del gran No sé...


Quiero tan solo hundirte en la suave tierra húmeda, yo, seré la lluvia que te contemple desde la puerta del cielo, antes de cerrarlo con llave y tirarla al fondo del mar...

En veces...

En veces, nadamos sobre este ruido silencioso, vagando sobre brechas y caminos que la luna apunta con su gran dedo sobre nuestras narices....

Retoza tu ruido en mí espejo del mar, camuflajea tu ser autoctono en el viento para que puedas estar siempre presente, como lo fué mi futuro y será mi pasado...


Calles ambiguas de realidad, esperando que dos cuerpos se dejen seducir por su suave piel asfaltica, sintiendose sobre una gran cama de clavos que nos sonrien sin miedo, sin prejuicio, y con muchas ganas de sentir....


Sentir, en veces, la electricidad de tu sonrisa, el aire que escapa de tus risas, el ritmo sonoro del vaivén del pasto en Julio, alimentarme de tí...


Planeo quedarme en tu pensamiento sensato y prudente, listo, agazapado, para tambien recibirte con el mar abierto en el mío...

Sol de 4 anhelos

La tierra dejó de estar húmeda hace varias estaciones del corazón, simplemente no era suficiente nada...

Sal de tu planta de luz, alumbra mi faro que apunta hacia tu ventana, soy un cuervo, un espantajaparos de la hierba en la cual flotas serenamente escuchando la llamada del susurro del parque en el cual te perdiste, no solo haz de esto una vaga y absurda noche, impacta en mi corazón con tus ganas, tus huellas en mi lodo intacto...

Incrustame en ti, tan solo, quitame la piel, hierve mi sangre, y haz con ello un hermoso abrigo para cubrirte de la noche anhelada que vigila la gran espalda de tus ojos color frenesí.

Liberaté conmigo, borra con el palpitar del desierto tu presencia...tan solo, recuestate bajo mi...

Aceptalo...