Mi sombra ya no se desdibuja sobre la tierra, ni mis recuerdos se relampaguean al compás de la noche, he sido arrastrado a la perfección del desierto, a la simetría del tiempo, he quedado atrapado, hundido en este mar llamado vida, y agonizante, pido a gritos ahogados poder metamorfearme en éter y vacilar como hoja de otoño en el vuelo del pájaro.
11:15 pm.
Rodrigo Pérez Téllez.
